El Festival de Otoño
A pesar de que el Maestro Feng Han había sido amigo de las máquinas de motores de fuego y los perros toda su vida, estando bajo dos generaciones de Emperadores poco confiables, su determinación fue moldeada repetidamente y escurrida toda su vida, no obstante, no dejó caer ni una gota. Cuando el país casi fue ocupado, había usado sus olorosos y duros huesos viejos para soportar el espíritu del Instituto Ling Shu.
–Es una lástima, bah. –dijo Gu Yun, haciendo a un lado su Armadura de Águila Negra, escupiendo una bocanada de arena y sin ninguna expresión en el rostro. –No hay un sucesor. Este Ge Pang Xiao no es lo suficientemente confiable, también esta ese Cao Niangzi… niño, ¿aún puedes caminar? ¿o debo darte una vuelta de “caballito”?
El joven del Instituto Ling Shu al lado estaba a punto de llorar del susto, nunca atreviéndose a causar problemas al Marqués del Orden, cojeando y sacudiendo su cabeza como en un ala rotativa de fuego llameante.
En frente de ellos se encontraba el vasto pastizal al otro lado del paso, y detrás de ellos había una pila de hierro ardiente destrozado al punto que uno ya no podía reconocer su forma. El Marqués del Orden dio un vistazo en la dirección del sol y agitó su mano irremediablemente: –Estoy familiarizado con este lugar. Ven conmigo. No volveré a la capital por una buena bebida, solo tengo que unirme a la diversión con ustedes, niños desafortunados, qué libre estoy.
Esta era una larga historia…
Cuando se acercaba el Festival de Mediados de Otoño, el General Gu, quien estaba inspeccionando las zonas fronterizas, fue atrapado por los asuntos militares de la defensa de la frontera durante varios días. Cuando estaba a punto de partir, ya era trece de agosto, y la vía del tren de vapor en el oeste continuaba en construcción. Si quería apresurar a regresar a tiempo para el festival con Chang Geng, tenía que volar directamente con la Armadura de Águila Negra.
Chang Geng no estaba dispuesto a permitirle viajar tan lejos, se inventó la excusa de una inspección para dejar la capital y envió una carta especialmente para decirle a Gu Yun que no se apresurara de regreso.
En los últimos años, el país estaba en paz; con Gu Yun protegiendo en todas direcciones, naturalmente, no había batallas por luchar. Además, toda la sangre en el Instituto Ling Shu estaba siendo invertida en experimentar con esto y aquello.
Ellos crearon una combinación del Águila Negra y el Cometa Gigante, su nombre aún no había sido determinado. Todavía continuaban experimentando en la Frontera Noroeste, la cual estaba escasamente habitada. Lucía como el pájaro de madera que el Pabellón Lin Yuan usaba para comunicarse. Tenía un enorme pecho y se estimaba que podía ser capaz de cargar a más de veinte Armaduras Negras.
Cuando el Mariscal Gu escuchó que el Instituto Ling Shu estaba paseando aves en el noroeste, fue a observar con curiosidad.
–¿El Cometa Gigante? Incluso un montón de mierda ya se habría enfriado, le tomaría medio año salir del paso. Es lento y consume muchísimo ziliujin. Además de hacer alarde del prestigio nacional, ¿qué más puede hacer? El Águila es rápida, pero es un lobo solitario con una carga limitada. Además, no todos pueden controlarla, también es agotador para la persona volando. –Ge Chen sacudió su cabeza y dijo. –Nuestro nuevo dispositivo tiene ambos, velocidad y capacidad de carga. En el futuro, también puede ser empleado para uso civil, especialmente para derrochadores como el Viejo Maestro Du. Marqués, señor, es mejor llegar al momento justo que llegar temprano. Acabamos de tener éxito en el vuelo de prueba, ¿le gustaría volar en un círculo?
Era normal para Gu Yun vestir el Armadura de Águila Negra para juguetear donde fuera. Como era solo un viaje por el cielo y no le costaba nada, accedió alegremente.
…como resultado, en el festival, sus jueguitos causaron problemas.
El Águila Negra requería que el usuario mantuviera el equilibrio por su cuenta, pero el Pájaro de Madera de enorme vientre estaba en manos de otros. El que operaba al pájaro de madera en el cielo era un joven miembro del Ling Shu. Mirándolo, debería tener entre dieciocho y diecinueve años de edad, cuando vio a Gu Yun ni siquiera se atrevió a respirar. No parecía confiable.
Gu Yun miró a su pequeño y redondo rostro vacilar un poco. Antes de que se pudiera sentar, el Pájaro de Madera subió al cielo como una flecha de arcoíris blanco. Incluso si tenía un gran pecho, su velocidad no era mucho más lenta que la del Águila Negra. Emitía un silbido agudo cuando despegaba y volaba en la desocupada naturaleza.
A diferencia del lento Cometa Gigante y el Águila Negra dentro de los que uno aun podía ser cortado por el viento frío incluso usando una máscara, esta cosa era muy cómoda. Gu Yun se la pasó bien. Después de volar una vuelta, pidió al pequeño del Ling Shu volar más alto y a un área más lejana.
Inesperadamente, en su camino, ocurrió que había un ave de verdad volando. Al ver esta cosa, pensando que se había encontrado con su ancestro crecido en exceso a plena luz del día, se olvidó de aletear y chocó directamente dentro del Pájaro de Madera.
Con el fin de aligerar la carga, el Pájaro de Madera no era como la Armadura del Águila Negra. En un vuelo a alta velocidad, el ala flameante fue golpeada directamente por un pajarito del tamaño de una palma, la caja dorada explotó inmediatamente como fuegos artificiales. Gu Yun en el estómago del pájaro de madera casi fue arrojado. Un Pájaro de Madera volador cayó en picada desde el cielo, con una estela de humo arremolinándose en su cola, y fue directo al norte.
Afortunadamente, Gu Yun tenía un par de Armaduras Águila en la cola del Pájaro de Madera. En el momento crítico, Gu Yun tomó al pequeño del Ling Shu, abrió el vientre del Pájaro de Madera, cargó la Armadura Águila y saltó antes de que el Pájaro de Madera aterrizara. Desafortunadamente, el Armadura Águila llevaba mucho tiempo sin reparación y no podía soportar el peso de dos personas. Después de apenas estabilizarse, Gu Yun voló durante cientos de metros cerca del suelo, con un fuerte “¡buum!” detrás de él.
El Pájaro de Madera se rostizó hasta convertirse en un pájaro chamuscado.
El pobre Ge Chen esperó durante un largo tiempo. El Marqués del Orden subió al Pájaro de Madera y nunca regresó. Estaba tan asustado que no podía ni ayudarse a sí mismo. Mientras lloraba, le pidió a alguien escribir una nota urgente a Chang Geng. Por el otro lado, salió a galope en su caballo hacia el norte, en busca de los rastros del Marqués.
–El Cometa Gigante es lento, pero tampoco se cae. –Gu Yun se quitó una de las alas del Armadura Águila para que el joven del Ling Shu la usara como muleta. –Ven aquí, te ayudaré. Tch, el Mariscal no muerde, no tengas miedo.
El joven del Ling Shu no tenía más de veinte años de edad. Cuando Gu Yun estaba defendiendo la capital y recuperando las cuatro regiones, todavía era un niño. Creció escuchando leyendas sobre este hombre y nunca esperó ver a la persona de verdad algún día… incluso casi cayó en la hoguera de hierba junto con el hombre. No sabía qué hacer porque estaba demasiado tenso, permitiendo que Gu Yun lo sostuviera. No se atrevió a respirar durante un largo tiempo, sus piernas de volvieron débiles.
–Ah, –Gu Yun vio que el pequeño del Ling Shu se inclinaba hacia un lado, él levantó su mano para sujetar la parte de atrás del cuello de su ropa. –Te digo ¿les está cortando raciones el Instituto Ling Shu? ¿Por qué eres así de débil tan joven?
Debido a que el Pájaro de Madera se había deslizado un largo camino después de ser golpeado y dañado, el lugar donde cayó era muy delicado. Parecía que estaba más allá de la frontera de la Gran Liang. En ese momento, el Pájaro de Madera había ardido. Con el fin de evitar problemas innecesarios, no era adecuado quedarse por un largo tiempo. Con tal carga sobre él, Gu Yun tampoco podía caminar rápido. Los dos habían estado caminando en el desolado pastizal durante un día.
El joven Ling Shu sabía que él era una carga. Estaba tan avergonzado que quería cavar un hoyo para enterrarse a sí mismo. Viendo al sol ponerse en el oeste, casi derrama sus lágrimas: –Marqués, señor, ¿porqué no solo me deja aquí y se adelanta? Luego puede buscar a alguien para que me recoja después, yo… yo…
–Vas a morir por mí, ¿porqué estas llorando? –Gu Yun se unió al ejército a los quince; nunca había visto a alguien tan llorón antes. Sintiéndose tenso, rápidamente levantó su mano y apuntó, –Mira, ¿no hay humo de chimenea en esa dirección?
A pesar de que Gu Yun encontró un antídoto para su veneno, las viejas costumbres nunca mueren; cuando estaba oscuro, seguía sin poder ver con claridad. Él simplemente caminaba a sentimiento y no podía ver nada. Solo apuntó a un sitio al azar para tranquilizar al niño.
Inesperadamente, después de que el pequeño Ling Shu lo escuchó, se frotó los ojos con fuerza y exclamó, –¡Marqués, realmente hay humo!
Gu Yun: –…
Mientras continuaban, Gu Yun se volvió más y más familiar con el paisaje a su alrededor. Había más y más personas alrededor. Viendo al rio oscuro que corría desde el exterior al pequeño pueblo, súbitamente se detuvo ¡y se dio cuenta de que habían arribado a Yanhui!
El pueblo de Yanhui había cambiado mucho. El sitio original del pueblo se convirtió en una parte de la zona de comercio fronterizo. Las viejas calles y tiendas en el pueblo se habían movido menos de diez kilómetros al sur. Las personas iban y venían a ambos lados del rio subterráneo. Había muchos comerciantes del norte y el sur. Gu Yun no tenía miedo de ser reconocido en la calle. Encontró una pequeña clínica para tratar las heridas de la colisión, bajó al joven y cojo Ling Shu y salió a dar un paseo.
Él vio que había un vendedor ambulante que venía desde un largo camino en el sendero vendiendo pasteles de osmanto de dulce aroma. Recordando que cuando Chang Geng estaba en Jiangnan en sus días de juventud, a él solo le gustaba esta comida, compró un kilo y medio.
Luego, descubrió que la muchedumbre y los carruajes se dirigían en dirección a la Colina del General y tuvo un poco de curiosidad: mucho tiempo atrás, las personas locales solían pensar que la Colina del General era de mal augurio; y los siguió con interés para investigar.
Un pequeño salón ancestral fue construido en la alguna vez desierta colina, el incienso era muy abundante y había un torrente infinito de turistas.
Gu Yun atrapó a un vendedor ambulante que vendía incienso y le preguntó, –¿Qué templo es este? ¿A cuál dios se adora?
El vendedor respondió entusiastamente, –Es el Dios de la Montaña. ¿Es su primera vez aquí, señor? Esta montaña es llamada “La Colina del General”, es el lugar más famoso en el pueblo de Yanhui. En años pasados, las tres facciones del Campamento del Hierro Negro descartaron aquí las armaduras rotas en su camino de regreso a la capital y formaron una colina. En ese entonces, el Mariscal Gu capturó a Jia Lai Ying Huo vivo en el pueblo Yanhui y trajo de vuelta al Cuarto Príncipe, quien es el actual Emperador. Escuché que, en sus años de juventud, Su Majestad a menudo practicaba con la espada en la Colina el General. Píenselo, esta montaña está protegida por las tres facciones del Campamento del Hierro Negro, y tiene el espíritu del verdadero Dragón, combinado con la luz del Emperador, ¿cómo no puede ser efectiva?
Gu Yun asintió repetidamente: –Si, efectivo.
El vendedor ambulante aprovechó la oportunidad: –Usted también debería comprar palillos de incienso para venerarlo, cada deseo se volverá realidad.
–Acepto sus benditas palabras. –Gu Yun pensó que era interesante, así que buscó por ahí algo de cambio. Planeaba rendir homenaje al espíritu del verdadero dragón que Chang Geng dejó atrás, y preguntó, –¿Por qué pide la gente? ¿Pasar los exámenes imperiales? Puesto que es La Colina del General, debe ser más efectivo rezar por los más altos lugares en los exámenes imperiales militares que en los literarios, ¿no es así?
El vendedor ambulante agitó su mano: –Los Bodhisttavas están a cargo de esas cosas. Nuestro Dios de la Montaña no.
–¿De qué está a cargo el Dios de la Montaña?
–Ascensos y volverse rico, por un buen matrimonio ¡e incluso para tener hijos! ¿Cuántas esposas y concubinas tiene, Maestro? ¿Cuántos hijos? ¿Tiene suficientes hijos e hijas? Si ya tiene suficientes, ¡podría también rezar por familiares y amigos! Ayudar a alguien más, ¡le garantizo que funcionará!
Gu Yun: –…
–¡No se vaya Maestro! Si no quiere hijos, también es muy efectivo pedir por riqueza. Puede tener excelente suerte el próximo año, el tazón y el vaso llenos, ¡y también puede pedir por matrimonio! Puedo ver que es apuesto y desinhibido, estará enlazado con flores de durazno por el resto de su vida…
Gu Yun rio, y lo reprendió: –¡Largo de aquí!
Cuando estaba en el campo de batalla de Liangjiang, conversó con Shen Ji Ping, diciendo que estaba “dispuesto a defender el país y volverse un general mundialmente famoso”, de manera que, después de cientos de años, las personas lo adoraran como a un Dios General, ganándose la vida de incienso y haciendo negocios como “estafas, casamentero y un Guanyin que concede hijos”[1]Capítulo 125..
No esperaba que, en menos de cien años, la pequeña colina en la que Chang Geng practicaba con la espada sería honrada primero.
Gu Yun liberó el pájaro de madera para informar a Ge Pang Xiao y sus hombres. Encontró una posada para descansar. Cuando miró hacia arriba y vio la luna plateada, se sorprendió de que esa fuera la noche del Festival de Mediados de Otoño. Todos habían ido a casa para una reunirse. No era de extrañar que la posada estuviera tan silenciosa.
Desde que recogió al agonizante y pequeño Chang Geng a las afueras del pueblo de Yanhui, habían transcurrido veinte años; el tiempo parecía agua, fluía silenciosamente.
Gu Yun sintió algo en su corazón; saltó al techo de la casa, sacó una flauta de jade blanco que llevaba con él y sopló. Sorpresivamente, no estaba fuera de tono.
Esa pieza fue escrita para él por Chang Geng un año por impulso. El Mariscal Gu aprendió una canción durante tres años. En este periodo, torturó a Chang Geng al punto de casi convertirlo en un Dios, haciéndolo querer cortar sus propias garras de dragón que causaban problemas; hubo un tiempo en el que, al ver la flauta de jade, le daba migraña.
En ese momento, un largo chillido llegó desde el cielo, y varias Armaduras Águila Negra bajaron en círculos. Gu Yun levantó su cabeza inesperadamente: –Estos chicos llegaron bastante rápido…
Antes de que la palabra “rápido” fuera terminada, la primera Águila Negra se lanzó hacia abajo. Llegó una fuerte ráfaga de viento, casi aturdiendo los ojos de Gu Yun. Al momento siguiente, fue tomado por alguien por la línea del cuello. Bajo el gran poder del ziliujin, Gu Yun fue levantado, sus pies se separaron del suelo, las lámparas en la posada se extinguieron debido a las alas del Águila.
Gu Yun no había visto aún quién era tan atrevido, cuando alguien dijo a su oído, –¡Gu Zi Xi!
Gu Yun estaba sorprendido y súbitamente volvió su cabeza. Vio a Su Majestad que estaba “patrullando”: –¿No eres…?
Todas las Águilas que seguían a Chang Geng cayeron al suelo y se hincaron sobre una rodilla.
Chang Geng no podía soportar dejarlo correr por ahí, pero siempre estaba bien que él lo hiciera. Usó la Armadura Águila Negra para volar todo el camino, queriendo sorprenderlo, pero antes de que pudiera arribar al Campamento del Noroeste, fue impactado por las noticias de Ge Chen. En ese momento, sus manos aun temblaban y no pudo hablar por un momento.
Tan pronto como Gu Yun vio que estaba desgastado por el viaje, inmediatamente supuso el noventa por ciento de lo que estaba ocurriendo. Pensó “oh, no”, debió ser porque le faltó al respeto al Dios de la Montaña de la Colina del General, lo que lo enfureció, por lo tanto, el Dios le había enviado a este hombre: era su flor de durazno, así como su mala fortuna.
Agitó su mano para permitir que las Águilas Negras se dispersaran. Rápidamente dio un paso para adelante, sujetó el codo de Chang Geng y suavemente conectó la siguiente línea de palabras: –¿No eres tú el Dios del Palacio de la Luna? ¿Cómo te escabulliste aquí abajo?
Chang Geng se sacudió su mano… pero fue incapaz, riendo de rabia extrema: –¡Basta de usar este truco, suéltame!
Gu Yun lo puso cuidadosamente en sus brazos: –No, puesto que ya estás en mis manos, en este vasto mundo mortal, no pienses en regresar al cielo.
Chang Geng lo miró. No obstante, viendo el rostro que no había contemplado durante tres meses, sus cejas enfurecidas colapsaron.
–Creí que, si ese Pájaro de Madera realmente estaba terminado, sería capaz de volver a verte en el siguiente Festival de Mediados de Otoño, ¿no está bien eso? –Gu Yun continuó con sus esfuerzos y lo miró. –No culpes a Xiao Ge, ¿está bien?
Chang Geng nunca tenía temperamento o fondo cuando se trataba de él. Después de escuchar sus suaves palabras, el enojo en su rostro se había dispersado a la mitad y solo pudo forzar una cara inexpresiva con dificultad.
–Además, ¿no llevé una Armadura Águila conmigo? Debo saber que es absolutamente seguro. ¿Cómo me atrevería a preocuparte? –las cejas de Gu Yun se inclinaron, usando su carta de triunfo, sacó un aceitoso paquete de papel de sus brazos. Antes de que fuera abierto, la fragancia del osmanto ya había salido. –¿Qué crees que es esto?
Chang Geng: –…
Gu Yun tomó su mano y continuó empujando su suerte: –De lo contrario, ¿no tendrás oportunidad de volver a visitar Yanhui. ¿Aún recuerdas esto?
Chang Geng atesoró el pastel de dulce aroma a osmanto en sus brazos. Una expresión complicada destelló en su rostro, luego habló molesto: –Si, aún recuerdo que tú estabas sordo y ciego, insistiendo en ir al mercado atestado de gente, incluso casi cayendo en el rio oscuro…
Cuando dijo esto, súbitamente recordó algo. Volvió la mirada a Gu Yun y dijo: –Veinte años atrás, me agotaba por tu culpa. ¿Cómo es que después de veinte años, todavía no hay ningún progreso?
Gu Yun rio y lo arrastró afuera: –He hecho progresos, te llevaré a ver el nuevo pueblo de Yanhui. Hoy, no habrá personas irrelevantes, solo nosotros dos.
–¿Pueden tus dulces palabras ser llamadas progreso? Tú…
Antes de que Chang Geng terminara su palabra, escuchó un gritó haciendo eco en el viento: –¡Marqués…!
Ge Chen estaba ahí.
Gu Yun tiró de Chang Geng y salió por la puerta trasera de la posada: –Las personas irrelevantes arriban tan pronto como las mencionas, ¡vamos!
Chang Geng no sabía si reír o frustrarse, siendo arrastrado todo el camino por el pequeño callejón.
Gu Yun giró a la izquierda y derecha, y se deshizo de Ge Chen. Con el trazo de una sonrisa maliciosa, anunció: –Te llevaré de aquí hasta allá. A lo largo del oscuro rio hacia el norte, la Colina del General es muy bulliciosa. El rio subterráneo está abierto esta noche, hay muchos barcos. Podemos volver en bote.
Chang Geng dijo con una sonrisa: –También puedes venir en bote.
–¿Huh, qué? –Gu Yun estaba sorprendido. Entonces escuchó el sonido familiar de un instrumento. Súbitamente giró su cabeza y vio un enorme bote en medio del rio oscuro. Shen Yi permitió a su apreciado hijo montar en sus hombros, quien estaba tranquilamente meciendo su cabeza mientras escuchaba a la señorita Chen tocar.
Levantó la mirada y se encontró con sus ojos, uniendo sus manos hacia él desde la distancia. Sonrió, mostrando sus blancos dientes, los cuales eran particularmente claros bajo el rio nocturno con linternas flotando.
–¡Mariscal! –varias armaduras Águila Negra aterrizaron en el bote de Shen Yi una tras otra. La que estaba a la cabeza, con la voz más fuerte, era el Viejo He. Sostenía el pájaro de madera liberado por Gu Yun en su mano, riendo con una boca muy abierta: –Escuché que cayó mientras paseaba en el pájaro. ¡Jajajá!
Gu Yun: –…
Era raro verlo exasperado, Chang Geng no pudo evitar sonreír.
El sonido del rio subterráneo retumbaba. Bajo la clara luz de luna, las sombras de los árboles se arremolinaban. Cuando miró alrededor, descubrió que el lugar donde había crecido estaba más allá de lo reconocible.
Los bárbaros del norte se habían ido, y la expedición se había terminado.
El viento del otoño no podía dispersar a la brillante luna. En ese momento, la luna estaba llena, las personas felices, el mundo había cambiado.
El fin.
«Regresamos al lugar donde la historia comienza. Gracias por su apoyo todo este tiempo.»
Northwest Flower (De la traducción al inglés)
¡Hemos llegado al último extra!
Gracias a todos los que me apoyaron durante la larga traducción de esta historia. Es realmente un placer compartirla y espero también se convierta en una de sus favoritas así como es de las mías.
Espero pronto seguir con algún otro proyecto tan hermoso como este.
Verona Camoli
(人 •͈ᴗ•͈) Siento una mezcla de alegría por el fin y melancolía porque ha terminado, pero todas las historias terminan… Gracias por todo tu trabajo. Ha sido genial leerte. Brindo por más proyectos y por seguir leyéndote!