68. Envenenado
«Por favor, nunca hables de liderar a tu ejército para convertirte en un gran noble, puedes decir que mi corazón es claro como el cristal y mantiene la pureza del jade.»
Gu Yun se sentó adecuadamente a lomos de su caballo y preguntó: –¿Todavía está ahí?
Shen Yi levantó el Qian Li Yan en respuesta y miró hacia atrás: –Sí.
Gu Yun dejó la capital en un día hermoso, era una rara ocasión con la luz del sol esparciéndose por dieciséis kilómetros. El Emperador Long An lideró a un ciento de oficiales civiles y militares para verlos partir, despidiéndolos en la puerta de la ciudad, observando hasta que las figuras de los hombres y los caballos se esfumaron de la vista antes de dispersarse. Yan Wang era el único que no se había ido.
Subió a la única torre de vigilancia que quedó en la puerta colapsada y observó a la figura del General de Hierro Negro sin moverse, parecía que se quedaría parado hasta el fin de la tierra y los cielos.
Gu Yun no miró hacia atrás, sino que le dijo a Shen Yi, –¿Qué tan lejos hemos llegado ya? Incluso el Qian Li Yan ya no debería ser capaz de ver con claridad. Deberías dejar de decir tonterías.
Shen Yi dijo enojado, –Si crees que mi vista es mala, entonces observa por ti mismo. Continúas ordenándome una y otra vez, las demás personas asumirán que hay algo sospechoso entre Su Alteza y yo.
Gu Yun tenía preparado un puñado de excusas: –Intenta darte la vuelta mientras estás envuelto en acero, tantas tonterías.
Shen Yi se burló, sin molestarse en delatarlo.
–¿Ya estaré en ese punto? –Gu Yun hizo una pausa, luego respondió su propia pregunta: –No uses tu miserable corazón de vieja criada para medir este vasto corazón de General mío, que puede contener miles de naves.
Había un dicho: «toma cien días para que los huesos se unan y los tendones se curen». Gu Yun fue desenterrado de entre una pila de cuerpos muertos, arrancado de la muerte, vivo de nuevo sin haber muerto[1]NTE. (…was dug out of the heap of dead bodies. Counting both when he was dead and alive…) en la tradución al inglés, hice una adaptación hibrida con el texto en chino para que fuera más coherente en español: (被从死人堆里刨出来 […fue arrancado de la muerte],连死再活 [vivo de nuevo sin morir…]) . Contando este tiempo, no había transcurrido más de medio mes. Sin mencionar a un individuo, incluso si una armadura de acero sufría un daño severo, no sería fácil arreglar esto rápidamente. Cuando Gu Yun solicitó ir hacia el noroeste, Yan Wang se había puesto furioso y casi discutió con él en frente de los ministros.
Incluso Li Feng, el tonto Emperador, quien “no alimentó al ganado, sino que sólo lo dejó trabajar”, se sintió de alguna forma preocupado.
Pero en este momento, debería haber alguien para reorganizar al Campamento del Hierro Negro.
Los occidentales no fueron capaces de rodear la capital. Estando medio muertos, ocuparon el sur de Changjiang. No les debió haber quedado energía restante para hacerse cargo de sus pobres aliados. El lado del noroeste tenía ahora a las tropas aliadas de las regiones occidentales y las dieciocho tribus norteñas de Man. No podían ser considerados como un bloque monolítico. Si podían invertir la situación de la guerra en el noroeste y resolver el problema más apremiante en el presente de ziliujin, entonces combatir a los occidentales de vuelta a su hogar era sólo una cuestión de tiempo.
Gu Yun tenía que ir en persona. Un millar de tropas era fácil de obtener, un General era difícil de conseguir.
Al final, Chen Qing Xu vino a resolver este dilema. Ella presentó una idea fascinante: el emplear una placa de acero especial producida a máxima velocidad por el Instituto Ling Shu. Podía sujetarse fuertemente al cuerpo para asegurar los huesos de Gu Yun que no habían sanado. De esta forma, era como hubiera hecho un juego de huesos de acero artificiales y un armazón para él.
A pesar de que traerla puesta no se sentía del todo bien, garantizaba que él continuara luciendo como si aún se pudiera mover naturalmente.
Shen Yi suspiró: –Te lo digo, Mariscal, apresúrate y húndete de vuelta en tu vasto corazón. ¿Qué vas a hacer?
Gu Yun se concentró en flotar en el bote de su corazón, actuando sordo y ciego.
Shen Yi vio que el hombre estaba usando este truco de nuevo. De inmediato respiró hondo y elevó su voz. Gritó: –Te lo digo Mariscal, Yan… ¡Hey!
Gu Yun volteó su mano y le lanzó latigazo. Shen Yi puso el Cortavientos peligrosamente frente a su pecho. Sus ojos se abrieron mucho, palmeando continuamente su pecho. –¡Qué peligroso! Casi arruinando mi rostro… hey, Mariscal, ¿ya te has enfurecido de vergüenza después de unas cuantas palabras serias? A pesar de que el Maestro Liao Chi es un espía de Dong Ying, pero su flatulencia de sándalo no es completamente irrazonable. Creo que tu destino es realmente robusto[2]Refiriéndose a alguien que nació en un día de mala suerte, cuyo destino contraataca a sus seres queridos., la Estrella del Fénix Rojo[3]La estrella de mayor fortuna en las leyendas, a cargo de ocasiones de júbilo relacionadas con las bodas. no puede volar incluso con alas. Pero ahora que finalmente ha sido capaz de despegar por una vez, sin embargo, todo lo que topaste son flores de durazno podridas.
Gu Yun: –…
Shen Yi apretó sus labios, sintiendo que el cuello Gu Yun debería realmente ser difícil de girar, de otra forma ya se habría apresurado a darle una paliza.
Gu Yun tomó de vuelta su látigo, permaneció en silencio por un momento y luego sacudió su cabeza. –El país se encuentra casi al borde de la muerte. ¿Qué más podemos hacer? El ser capaz de vivir otro día es suficientemente bueno, quizás este cuerpo algún día estará envuelto en piel de caballo. ¿Cuál sería el punto de pensarlo tanto?
Shen Yi frunció el ceño con sus palabras. Entendía muy bien a Gu Yun. Si Gu Yun realmente no tuviera nada de sentimientos, lo hubiera dicho directamente. Nunca hubiera existido ninguna ambigüedad. En el presente, escuchándolo, quizás no sin incertidumbre, era mejor decir que su corazón ya se había inclinado hacia un lado. Era sólo a causa de unas cuantas preocupaciones que él temporalmente no lo había expresado abiertamente.
Shen Yi: –Espera, Zi Xi, no harías…
Gu Yun: –Ya no estamos hablando más de este tema.
Shen Yi: –¡Ese es tu hijo!
Gu Yun: –¿Todavía necesito escuchar estas tonterías de tu parte?
La expresión de Shen Yi era de terror, Gu Yun miró hacia otro lado con impaciencia.
Sin ver a esta vieja criada, lo había extrañado mucho, pero tan pronto como él estuvo aquí, sintió que el hombre era demasiado fastidioso. Gu Yun simplemente hizo caminar a su caballo y aceleró, alejándose del lado de Shen Yi. Tomó una flauta de jade en sus brazos y comenzó a tocar una melodía ahogada.
Ningún instrumento musical podía producir un sonido decente en las manos de Gu Yun. En ese momento, él estaba fijado entre placas de acero, no había aire suficiente. Su voz era un poco temblorosa. Dejó correr los dedos sobre los agujeros en la flauta como un caballo salvaje, la melodía estaba por doquier, debió haber sonado interesante.
Pero en esta ocasión, el sonido de la flauta fue llevado por el viento, envuelto en el suspiro de aquel partiendo hacia el oeste del Paso Yang[4]Hace referencia al poema titulado “Despidida de Yuan’er en su Misión a Anxi” de Wang Wei (701-761), traducido por Bill Porter. La línea completa es “Al oeste del Paso Yang no hay nadie a quién tu conozcas”, y es un poema de despedida, he aquí porque la inexplicable desolación., torciéndose inesperadamente en una sensación inexplicable de desolación. Nadie fue capaz de reír.
La espalda y la cintura de Gu Yun estaban fijadas rectas por la placa de acero de la señorita Chen: como una viga que nunca colapsará; con dos Cortavientos dañados a su espalda… ninguno de ellos le pertenecía.
Chen Qing Xu, quien estaba acompañando al ejército, escuchó el eco de la flauta cerca y lejos desde atrás. Ella susurró su sentimiento, –Por favor, nunca hables de liderar a tu ejército para convertirte en un gran noble[5]Del poema 己亥歲二首 de Cao Song. El siguiente verso es: “la victoria de un General se construye sobre diez mil huesos pudriéndose.”…
–Por favor, nunca hables de liderar a tu ejército para convertirte en un gran noble, –Gu Yun pasó volando junto a ella, sus siguientes palabras yéndose completamente fuera de la tangente. –puedes decir que mi corazón es claro como el cristal y mantiene la pureza del jade[6]Del poema 芙蓉樓送辛漸 de Wang Chang Ling. Esta línea ha sido considerada una obra maestra para expresar un corazón puro y noble., jajá jajá.
Chen Qing Xu: –…
Siendo interrumpida, ¡por un momento no pudo recordar el segundo verso!
Gu Yun marchó como el viento. Con la médica experta, la señorita Chen, acompañándolos, no había preocupación acerca de que se le cayera la placa de acero. Recién habiendo dejado atrás el territorio de Zhili, ya habían sido atacados por dos olas de grupos insurgentes. Ninguna fue a gran escala, dispersándose de inmediato, huyendo tan pronto hicieron contacto como varios perros de sondeo salvajes.
–Justo después de dejar la ciudad capital, ya estamos siendo seguidos. –le dijo Shen Yi a Gu Yun. –Ya he lidiado con ellos antes, son astutos y están familiarizados con el territorio. Huirán en el momento en el que se den cuenta de que no pueden ganar, y luego rápidamente se prenderán de nuevo a su oponente. Era muy molesto. Escuché acerca de las noticias del asedio en la capital cuando llegué aquí. Con tal apuro, estaba enfurecido por su aferración.
Gu Yun respondió con un “ah” y le tendió a Shen Yi su Qian Li Yan. –Me temo que su estratega amateur ha estudiado por unos días.
Shen Yi: –¿Qué?
Gu Yun: –He escuchado que cuando finges una retirada, es necesario estar en desorden, cortando tus propias banderas para engañar al oponente y que te persiga. Desafortunadamente, esos soldados han fallado en capturar el espíritu. La asta de la bandera fue cortada por ellos mismos. Lo acabo de ver.
Shen Yi: –…
Gu Yun frunció el ceño y dijo: –¿Por qué se están rebelando esas personas? ¿Lo sabes? ¿No pueden soportar vivir más tiempo?
–No del todo, –dijo Shen Yi con un tono burlón, –piensas demasiado bien de esos vagabundos. Incluso si no hay trabajo, la mayoría de la gente buena abriría un pequeño negocio o aprendería un oficio, no está en el punto en el que no sean capaces de sobrevivir. Esos vagos, desde los Planos Centrales hasta Sichuan, sólo son matones holgazanes, quienes fueron agrupados por alguien con malas intenciones. Además de hostigar al General Cai, usualmente están envueltos con asuntos de robo. Correrán tan pronto como el ejército los persiga, y regresará después de que las cosas se calmen un poco.
“–He escuchado que además del robo también tienen una regla. Si un hombre adulto de una familia se les une a la rebelión, la familia ya no será atacada por ladrones. Sus esposas, hijas y hermanas también pueden ser protegidas. No hay que preocuparse sobre ser asaltados a cada momento.
–… –Gu Yun dijo: –Más despacio, esto suena familiar, ¿no es esto lo mismo que el sistema de esclavitud de la Gran Liang? Los hogares militares no tienen que pagar impuestos.
Shen Yi no podía soportarlo: –Mariscal, ¿de qué lado estas?
–Está bien, está bien, no te enojes. –dijo Gu Yun. –De esta forma, ¿no hay más y más bandidos? No solo es libre de impuestos, sino que hay un grupo de personas siguiéndolos, también es posible evadir los conflictos, ¿quién es el líder?
–Dijeron que es un viejo bandido que luce muy terrorífico. Ha estado trabajando en esta clase de asuntos durante muchos años. Su cuerpo está cubierto de cicatrices, incluso su rostro fue quemado en el pasado, se llama a sí mismo “Huo Long”. –Shen Yi suspiró y dijo: –¿Qué crees que debamos hacer? ¿Deberíamos viajar rápidamente durante dos días para rodear a la turba e ir directamente a la estación refuerzos del noroeste del General Cai?
Gu Yun caminó por un momento con sus manos por detrás de la espalda. –Hay ambos, problemas internos y externos, vamos a resolver todo lo que podamos. Hay tigres y lobos al frente, no puede haber ninguna preocupación detrás. Piensa en un reporte y envíaselo al Gran Consejo. Di que tendremos que quedarnos aquí por tres o cinco días.
Después de que el sitio de la capital se hubiera levantado, Li Feng abolió de inmediato los dos ministros de izquierda y derecha sentándose ociosamente y comiendo salario. Entonces, con el fin de hacer más fácil la administración, imitó el sistema oficial de la dinastía anterior, estableciendo el Gran Consejo[7]El Gran Consejo (军机处; Literalmente Oficina de Secretos Militares, u Oficina de Asuntos Políticos y Militares) fue un ente para la formulación de políticas durante la dinastía Qing., liderando a los seis ministerios e iniciando a un número de ministros académicos quienes ahora podían mostrar sus verdaderas habilidades en tiempos difíciles.
En el Gran Consejo, las luces siempre estaban encendidas incluso muy entrada la noche. Cuando Jiang Chong empujó la puerta para entrar, ya era el tercer periodo de la guardia nocturna[8]Desde las 11:00p.m. hasta la 1:00a.m.. Las lámparas de vapor estaban tan brillantes como el día, pero Yan Wang había caído dormido sobre la mesa con el pincel aun en su mano.
Jiang Chong no quiso alarmarlo. Tomó personalmente la pila de reportes que sostenía un sirviente, luego despidió a todos los subordinados y caminó suavemente al interior. Pero después de todo, él era un oficial civil, no estaba bien versado en ocultar los sonidos de su movimiento.
Chang Geng se despertó sobresaltado a causa de él. En el momento en que sus ojos se abrieron, marcas rojas destellaron a través de los normalmente exquisitos ojos de Yan Wang, como una luz feroz repleta de instinto asesino, surgiendo repentinamente contra la persona frente a él.
Jiang Chong aun no era capaz de reaccionar, pero de inmediato había rompido en un sudor frio, como un conejo atrapado por el instinto asesino de una bestia. Retrocedió un paso involuntariamente. La larga manga arrastró hacia abajo el portapinceles de Chang Geng y éste cayó inmediatamente.
Solo entonces se despejó Chang Geng, y en un instante, su aura asesina fue devuelta tan rápidamente como una nube dispersa. Se incorporó y dijo: –No hay problema, yo lo limpiaré.
Jiang Chong lo miró con horror y se preguntó si recién se había confundido, si sus ojos lo habían engañado debido al agotamiento. Preguntó cuidadosamente, –¿Padece su Alteza de parálisis de sueño?
–No es nada. –dijo casualmente Chang Geng, –Mi pecho estaba presionado… ¿lo asustó mi desagradable expresión? Normalmente soy un poco impulsivo cuando despierto. Justo ahora, me quedé dormido por un rato, casi no sabía dónde estaba.
Al haber dicho esto, Jiang Chong no pudo hacer más preguntas. Sintió que lo “impulsivo” de Su Alteza después de ser despertado era un tanto muy extremo.
Chang Geng organizó el portapinceles que había volcado y preguntó, –¿Por qué? ¿Tiene algún asunto el Hermano Han Shi?
Jiang Chong volvió en sí y se sentó en el lado opuesto a él. –Debido a lo que dijo Su Alteza ayer en la reunión de la corte, sobre expedir los “billetes Feng Huo” a las personas, hubo una conmoción en la corte. La corte pidiendo dinero prestado a los ciudadanos, esto es algo nunca antes visto. ¿No sería lo mismo que declarar al mundo que nuestro tesoro está vacío? ¿Dónde quedará la dignidad de la corte?
Chang Geng parecía no haber despertado por completo, sentándose en una silla y apretándose la frente incesantemente. Al escuchar esto, rio y dijo: –Perder la mitad de la nación, ¿sería esto dignidad?
Jiang Chong: –Los demás se han cuestionado qué pasaría si la corte no es capaz de pagarle de vuelta a la gente cuando llegue el momento, también Su Alteza está al tanto de estado del tesoro.
–Separaremos los periodos para el reembolso, entonces expediremos la segunda y la tercera tanda. Por ahora, podemos pedirles prestado, seremos capaces de encontrar una forma de darle un giro al final. –dijo Chang Geng. –El primer grupo de gente que compre los billetes Feng Huo puede tener algunos beneficios apropiados, tales como títulos falsos y vacantes en la corte, permisos especiales… todo es posible. Idealmente, si esto continua, las personas pueden emplear los billetes Feng Huo como moneda.
–Si ese fuera el caso, –Jiang Chong vaciló. –¿no volarían esos billetes por todo el cielo? Están destinados a ser inútiles.
Chang Geng: –Después de que la corte recupere su fuerza, podemos comprarlos de regreso. Ya sea pagando de vuelta el dinero o reteniendo los billetes, o ya sea estableciendo sistemas especiales o promulgando leyes, todos esos son asuntos del futuro.
Jiang Chong asintió, luego dijo de nuevo: –Los están preguntando, ¿y si en el futuro alguien crea billetes falsos y viene a la corte con los billetes falsos a pedir dinero?
Chang Geng fue enfurecido por esta observación al punto de dejar salir una risa: –Dígales que lleven este asunto al Instituto Ling Shu, ¿deberían esta clase de detalles ser traídos ante el Gran Consejo? ¿Deberíamos discutir mañana sobre la adecuada reglamentación para usar el baño?
Jiang Chong rio amargamente: –Esa es la verdad, pero Su Alteza también sabe cómo son esos censores imperiales… no hay nada que sepan hacer excepto por pelear. Escuché que ahora se encuentran escribiendo sus reportes durante toda la noche para revelar sus errores.
Chang Geng suspiró, –Hablando de miles de ideas, esto es solo una solución para resolver esta urgencia en tiempos de guerra. De otra forma, ¿qué más podemos hacer? ¿Deberíamos comenzar a imponer fuertes impuestos a los refugiados de la ciudad o deberíamos desmantelar el palacio del Emperador en partes y venderlas por dinero? Si hay preguntas, siéntanse libres de traerlas a la sesión de la corte. Si puedo, las responderé en el momento. Si algo aun no queda claro, regresaré a pensarlo cuidadosamente y más tarde proveeré una respuesta, esas personas…
Este era el estado actual de la corte, donde solo un pequeño grupo de gente era responsable de encargarse de los asuntos, mientras que la mayoría de los demás eran responsables de causar problemas y poner obstáculos. Si algo tenía éxito, ellos se alabarían a sí mismos por su propia y detenida calculación. Si algo fuera a fallar, dirían: “¿por qué no me escucharon en ese momento?”
Por no mencionar que también había personas causando problemas quienes albergaban sus propios ideales y que tenían poderosas relaciones, convirtiéndose en un obstáculo y queriendo hacer que algo se vuelva más difícil que volar hacia el cielo… no era de extrañar que, aunque todos conocían en principio de “escuchar a todos los lados con el fin de formar una idea completa”, pero la practica más común en la historia era que siempre sería el Emperador dictatorial y los más poderosos ministros quienes dirigían las cortes imperiales.
–Esto no iba dirigido a usted, Hermano Han Shi, no se lo tome a pecho. –Chang Geng agitó su mano. –He estado discutiendo demasiado últimamente, puedo ser un poco impetuoso.
–Hablando del Instituto Ling Shu, el Maestro Han mandó ayer dos solicitudes más. Este humilde oficial ha tomado la iniciativa de retenerlas primero. Su Alteza, por favor deles un vistazo para ver si pueden ser enviadas.
Chang Geng se sirvió una taza de té de hierbas que ya se había enfriado durante la noche: –Ah, ¿qué es lo que dice?
–Una es para que el Emperador revoque el decreto y levante la prohibición para los mecánicos de la gente común. La otra es para que el Emperador retire la prohibición para el comercio de ziliujin entre la gente. Ha dicho que los comerciantes adinerados tienen su propia forma. La crisis nacional está a la mano. Es mejor hacer completo uso de esas personas, de manera que el almacén de ziliujin de la Gran Liang pueda muchas fuentes.
Chang Geng hizo una pausa, luego sacudió su cabeza: –El Maestro Feng Han… tch, este Maestro Feng Han.
El anciano dio paso adelante en la batalla cuando la capital fue asediada, su valiente espíritu había dejado una fuerte impresión en Li Feng. A pesar de que su temperamento era molesto, siendo al mismo tiempo un terco y cabeza dura, pero su lealtad era incuestionable. Por lo que, recientemente, cualquier tontería de la que pudiera hablar, Li Feng las toleraría todas.
–Todos pueden ver sobre la solicitud para revocar la prohibición de los mecánicos. Si no hay un mayor problema, mándela. –dijo Chang Geng. –Olvídelo con respecto al asunto del ziliujin. ¿Es tan cómodo desarraigar las escamas del dragón del Emperador? Sea flexible, ayude al Maestro Feng Han a resumir el punto principal y luego siga adelante con la solicitud. Regrésele la versión original.
Jiang Chong respondió con reluctancia y estaba a punto de ponerse de pie para retirarse, entonces pareció haber recordado algo: se dio la vuelta y dijo, –Por cierto, también está el Marqués del Orden…
Chang Geng levantó la vista repentinamente.
Li Feng había regresado el Emblema del Tigre Negro a Gu Yun y le dio el poder para desplegar fuerzas y el suministro de guerra en todas direcciones. Era razonable que no tuviera que reportar todos los eventos mayores y menores a lo largo del camino en detalle. Sin embargo, Gu Yun no aceptó este trato especial, sino que en lugar de esto hizo reportes regularmente: a dónde iba, cuál era la situación, qué planeaba hacer y por qué razón, era enlistado a detalle.
Jiang Chong: –El Marqués del Orden acaba de llegar a la zona de los Planos Centrales, no hay nada demasiado serio. Solo dijo que se encontró con un grupo de bandidos e insurgentes, y que planeaba hacerse cargo de ellos adecuadamente antes de partir. No le tomará más de tres o cinco días.
Chang Geng hizo un sonido de “mn” en respuesta: –Déjemelo aquí para darle un vistazo.
Jiang Chong no pudo evitar elogiarlo: –Todos los asuntos desde los mayores hasta los triviales caen frente a Su Alteza. Cuando se trata de otras personas, solo escuchará el resumen. Solo los reportes del Mariscal son minuciosamente revisados de principio al fin. Los sentimientos entre Su Alteza y el Mariscal en verdad son profundos.
Después de terminar sus palabras, estaba a punto de despedirse y partir, pero tan pronto como alcanzó la puerta, Chang Geng lo llamó repentinamente: –Hermano Han Shi.
Jiang Chong se dio la vuelta: –¿Tiene Su Alteza alguna otra instrucción?
Chang Geng puso su mano sobre el reporte de Gu Yun, acariciándolo gentilmente de manera inconsciente. Se quedó en silencio por un momento, luego dijo sin titubear: –Lamento molestarlo, pero ayúdeme a reunir las objeciones de los oficiales de la corte sobre los billetes Feng Huo: quiénes, cuándo y qué dijeron. Revisaré el plan según corresponda.
Jiang Chong estaba impactado ¿sería necesario escuchar acerca de “quién” y “cuándo” para revisar el plan? No pudo evitar sino mirar a Yan Wang a través de la lámpara de vapor brillando durante toda la noche. Su rostro claramente pertenecía a un hombre joven, pero sus ojos no daban la más ligera pinta de ser un novato. A primera vista, él pensaría que era un hombre elegante de la nobleza. A segunda vista, descubrió que sus ojos no eran para nada así de pacíficos, sino que en lugar de eso filtraban una pizca de frialdad.
Escuchó que el Cuarto Príncipe fue encomendado a Gu Yun por el anterior Emperador antes de su fallecimiento. Había crecido en la mansión del Marqués. Jiang Chong pronto se dio cuenta de que Su Alteza y el Marqués no eran para nada similares.
Jiang Chong: –… sí.
Chang Geng asintió ligeramente. Ambos eran hombres inteligentes, no había necesidad de más explicaciones.
Cuando Jiang Chong se fue con su corazón lleno de dudas y preocupaciones, Chang Geng finalmente dejó salir su aliento suavemente. Su sueño normalmente no era bueno. Finalmente había sido capaz de conseguir un poco de una incómoda siesta, pero después de ser interrumpido de esta manera, quizás no sería capaz de dormir más esta noche. Se incorporó para cambiar el incienso en el interior por el tranquilizante de la señorita Chen.
Chang Geng permaneció de pie en silencio por un momento en frente del tranquilizante emitiéndose sobre su rostro. La pesadilla cuyo contenido no podía recordar provocó que su pecho le doliera como si estuviera siendo pinchado por agujas. En frente de un extraño, lo había soportado forzosamente y no permitió que se mostrara. Este sentimiento era muy similar a numerosos raros ataques del Hueso de la Impureza.
Debido a las heridas de Gu Yun, la señorita Chen había acompañado al ejército. Antes de que ella se fuera, lo había llamado aparte, diciéndole que incrementara la cantidad de tranquilizante y que tuviera descansos tan pacíficos como pudiera, cuando fuera que tuviera oportunidad.
Inmensa alegría y grandes tragedias recientemente habían limpiado sus años acumular de bases pacíficas, seria tremendamente más difícil suprimirlo en el futuro. El Hueso de la Impureza prohíbe los pensamientos profundos: entre más pensara uno, más se drenaría su espíritu.
Pero, ¿qué más podía hacer? ¿lo arrojaría todo lejos y observaría a Gu Yun estando atrapado en esta nación arruinada?
Referencias[+]
⇧1 | NTE. (…was dug out of the heap of dead bodies. Counting both when he was dead and alive…) en la tradución al inglés, hice una adaptación hibrida con el texto en chino para que fuera más coherente en español: (被从死人堆里刨出来 [...fue arrancado de la muerte],连死再活 [vivo de nuevo sin morir…]) |
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⇧2 | Refiriéndose a alguien que nació en un día de mala suerte, cuyo destino contraataca a sus seres queridos. |
⇧3 | La estrella de mayor fortuna en las leyendas, a cargo de ocasiones de júbilo relacionadas con las bodas. |
⇧4 | Hace referencia al poema titulado “Despidida de Yuan’er en su Misión a Anxi” de Wang Wei (701-761), traducido por Bill Porter. La línea completa es “Al oeste del Paso Yang no hay nadie a quién tu conozcas”, y es un poema de despedida, he aquí porque la inexplicable desolación. |
⇧5 | Del poema 己亥歲二首 de Cao Song. El siguiente verso es: “la victoria de un General se construye sobre diez mil huesos pudriéndose.” |
⇧6 | Del poema 芙蓉樓送辛漸 de Wang Chang Ling. Esta línea ha sido considerada una obra maestra para expresar un corazón puro y noble. |
⇧7 | El Gran Consejo (军机处; Literalmente Oficina de Secretos Militares, u Oficina de Asuntos Políticos y Militares) fue un ente para la formulación de políticas durante la dinastía Qing. |
⇧8 | Desde las 11:00p.m. hasta la 1:00a.m. |