13. Disculpa

Este hombre de apellido Gu podría pensar que venía a disculparse, pero desafortunadamente, sin importa cómo se viera, parecía que llegó especialmente a buscar pelea.

En realidad, Gu Yun se hospedaba justo al lado de Chang Geng, pero, a diferencia del lugar donde estaba Chang Geng, el sitio donde se había instalado lucía bastante frío.

Si Chang Geng decía “no es necesaria la servidumbre” el Gobernador Guo definitivamente lo halagaría de forma desvergonzada: “el corazón de Su Alteza Real está con la gente” y procedería a mandar docenas de sirvientes.

No obstante, incluso si obtenía un enorme saco de valor, el Maestro Guo aún no se atrevería a decir una sola palabra de adulación en frente del Mariscal Gu.

Gu Yun casualmente mandó la orden de “no venir a molestar” donde él vivía. Excepto por los temibles soldados del Campamento del Hierro Negro, nadie se atrevería a entrar ni siquiera medio paso.

En situaciones en las que no podía ver ni oír bien, Gu Yun se pondría extremadamente tenso y agitado, y especialmente odiaría tener gente desconocida revoloteando encima.

Shen Yi no lo había visto tan tenso en un largo tiempo, como si cada árbol y arbusto fuera un soldado enemigo. Había pensado que, quizás por permanecer ocultos dos años en el pequeño pueblo de Yanhui, Gu Yun había aprendido cómo coexistir pacíficamente con este vago concepto de vida normal. Pero parecía ser imposible después de todo.

El que aprendió a vivir en paz fue solo “Shen Shiliu”, no Gu Yun.

De hecho, Gu Yun, esta persona, a pesar de que normalmente exhibía un comportamiento tranquilo y confiado, la verdad era, ocho de nueve partes de ello eran falsas, pero su actuación era simplemente tan real que nadie podía ver a través de ella.

Al mismo tiempo, a pesar de que su ceguera y sordera eran completamente reales, estas parecían solo un acto.

Desde este punto de vista, el Mariscal Gu había puesto un ejemplo sobre sí mismo para personificar el dicho “lo verdadero puede ser falso, lo falso puede ser verdadero”. Shen Yi no sabía si realmente le faltaba algo por dentro o si era intencional.

Ah, sí, su corazón también era sincero y genuino, pero tampoco parecía que mucha gente estaba convencida.

Cerca del anochecer, cuando la noche apenas había comenzado a caer y las estrellas del crepúsculo aún no se habían revelado, lo primero que hizo Gu Yun después de volver a su recámara fue encender todas las luces.

Después se quitó el monóculo, se frotó con fuerza los ojos, y le dijo a Shen Yi: –Dame mi medicina.

Shen Yi era un refinado y educado parlanchín. Aparte de combatir en batallas, su trabajo secundario era divagar; prosiguió con la facilidad obtenida de la práctica: –Gran Mariscal, el treinta por ciento de la medicina sigue siendo veneno. Cuando no es una emergencia extrema, creo que deberías beber tan poco como sea posible…

Gu Yun permaneció debajo de la lámpara, su expresión permanecía inmutable, su mirada estaba un poco aturdida y no respondió.

Shen Yi cerró su boca… recordó que, a esta distancia, Gu Yun no podía escucharlo.

La sordera de Gu Yun era un truco para restringir a todos los habladores. Un solo golpe suficiente para matar, en todos esos años nunca había fallado ni una sola vez. Shen Yi tuvo que darse la vuelta silenciosamente para ir a la cocina a preparar la medicina.

El monóculo era muy endeble, presionado sobre cualquier lado del puente de la nariz. Con tal solo un ligero cambio en la temperatura, condensaría una capa de vaho blanco y bloquearía por completo la línea de visión. También era bastante frágil y podía dañar los ojos fácilmente cuando se rompía. En general, era muy inconveniente para oficiales militares. Pero, si era solo para estar en la casa propia, es aun adecuado usarlo en caso de asuntos urgentes.

Después de que Shen Yi salió de nuevo, Gu Yun había recolocado el cristal sobre el puente de su nariz, remojó la tinta y comenzó a escribir su reporte.

A pesar de que el Gobernador Guo era solo un pequeño oficial en la frontera, su estilo de vida no era del todo pobre. La lámpara sobre la mesa no era solo una lámpara de aceite ordinaria, sino una lámpara de vapor cuyo brillo podía ajustarse. A juzgar por el complicado diseño de encaje, debió haber sido comprada de las manos de la gente del este.

También había un reloj occidental enseguida de la lámpara de vapor y, a pesar de que el producto era una falsificación, se veían tan bien como uno auténtico. Si se inspeccionaba con cuidado, arriba tenía finas marcas indicando las doce ramas terrenales, los diez troncos celestiales y el periodo de las doce horas del día[1]. La parte superior izquierda también tenía una pequeña ventana con los veinticuatro términos solares[2] alternándose. Este objeto parecía no ser ave ni pescado. La parte inferior del reloj era transparente, con engranajes pequeños y grandes moviéndose. Gu Yun odiaba esta cosa ya que los engranajes eran muy ruidosos cuando giraban; había considerado decirle a alguien que lo sacara.

Pero de momento eso no importaba, de cualquier manera, él no podía oír.

Cuando Shen Yi volvió con un tazón de medicina, Gu Yun acababa de terminar de escribir y bajó su pincel.

Gu Yun: –Revísalo por mí para ver si hay algo mal.

La lámpara de vapor era deslumbrante, había una hilera de mujeres occidentales mostrando sus pechos en la pantalla de la lámpara, todas posando en una forma que revelaba cada detalle, Shen Yi usó su mano para escudarse de la luz y susurró: –Qué vulgar.

Después leyó rápidamente el reporte de Gu Yun y suspiró: –¿Qué si hay algo mal? Mariscal, por favor perdona el conocimiento superficial y las humildes habilidades de este Shen, pero no veo una sola cosa que este bien en esto.

Gu Yun: –¿Uh? ¿Qué?

Shen Yi: –…

Levantó el reporte de Gu Yun por una esquina, lo puso de vuelta en los brazos de Gu Yun, sostuvo su codo suavemente y señaló al pequeño sillón enseguida de él, indicándole que solo debería quedarse ahí. Entonces, Shen Yi extendió su propio papel, hundió su pincel en la tinta e intentó comenzar a escribir uno nuevo.

Gu Yun tomó el tazón de medicina y lo bebió de una sola vez con entusiasmo. Se recargó en el sillón delicadamente tallado, sin ni siquiera quitarse los zapatos, luego se cruzó de piernas arriba y esperó con calma a que la medicina hiciera efecto. Al mismo tiempo, sus manos no se quedaron quietas: los diez dedos de Gu Yun rápidamente doblaron el reporte anterior en un ave de papel, entonces apuntó hacia la parte posterior de la cabeza de Shen Yi.

¡Qué tan bastardo puede ser este hombre!

Shen Yi escuchó el sonido del viento y atrapó el ave de papel con su mano. Admitiendo en verdad su derrota esta vez, preguntó a Gu Yun: –¿Puedes escucharme de esta forma?

–Está bien, aun un poco difuso. –dijo Gu Yun. –De cualquier forma, puedes parafrasear lo que he escrito antes adecuadamente y hacer que suene mejor por mí.

Shen Yi suspiró: –Mariscal, ¿quieres decirle al Emperador que fue el Cuarto Príncipe por sí solo quien vio a través de la conspiración de los bárbaros, y que ha dejado de lado el amor a su familia, para darnos la oportunidad de exterminarlos a todos de un solo golpe? ¿Creerías algo como esto?

Nadie sabía qué tipo de panacea había tomado Gu Yun, las dos marcas de belleza bajo su ojo y el lóbulo de su oreja parecían haber vuelto a la vida, destellando con un rojo brillante de nuevo.

–¿Y si no? –Gu Yun preguntó –De otra manera, ¿vamos a decirle a Su Majestad que quise dominar las fuerzas militares de la Gran Liang desde hace largo tiempo, que la situación en la Región Occidental apenas se ha estabilizado, pero ya estoy planeando tomar el control militar de la Frontera Norte y que pronto tomé ventaja de su orden de proteger al pequeño príncipe para escapar y tenderle una trampa a los bárbaros?

“–¿O deberíamos decir que he estado metiendo mis manos secretamente en los mercados negros ilegales de ziliujin que han sido repetidamente prohibidos, y que accidentalmente descubrí que la cantidad de ziliujin que fluye en esos mercados en años recientes es anormal?

Shen Yi: –…

Gu Yun habló orgullosamente: –Tu puedes darle vueltas y hacerlo sonar más creíble, de otra manera, ¿para qué te necesitaría? Además, teniendo esa desafortunada madre, Chang Geng, ese niño, después de que volvamos a la capital, probablemente será hostigado por esos viejos bastardos. Necesitas vestirlo bien por mí, di que el Cuarto Príncipe ha padecido una terrible vida, pero a pesar de haber pasado por muchas pruebas y situaciones difíciles, la sincera lealtad al país en su corazón no ha disminuido. Debes hacerlo desgarradoramente triste, mientras Su Majestad rompa en llanto mientras lo lee. Déjame ver quién se atreve a hablar.

Shen Yi: –…

Gu Yun acababa de hacerlo ir a engatusar al príncipe. Ahora quería que hiciera llorar al Emperador.

Shen Yi se burló y bajó el pincel: –Perdona a este Shen por no tener suficiente tinta dentro para esto, el Mariscal debería ir y solicitárselo a otro experto entonces.

Gu Yun: –¡Ah!

Shen Yi alzó su cabeza para ver a Gu Yun haciéndose la victima sin ni la más mínima pizca de vergüenza:

–Mi cabeza me duele. Duele, duele, duele, duele lo suficiente como para explotar… hermano Ji Ping, aparte de ti, no hay nadie que me ayude y me apoye, ¿cómo puedes tener el corazón para abandonarme así? Este solitario y desolado mundo mortal es en verdad despiadado, ¿para qué más debería vivir?

Entonces se apretó el pecho y se desplomó sobre el pequeño sillón en una posición de ataúd, haciéndose el muerto.

“…dices que te duele la cabeza, entonces ¿para qué estás apretando tu pecho?”

Líneas de venas azules se botaron en el dorso de la mano de Shen Yi.

Sin embargo, después de un rato, Shen Yi aun así se sentó de nuevo reluctantemente, expendió el papel, consideró cuidadosamente cada palabra y oración, y modificó el reporte de Gu Yun.

Después de que “el cadáver” de Gu Yun se desplomó, no volvió de nuevo a la vida, porque su cabeza realmente le dolía. Shen Yi también sabía que este era un efecto secundario de la medicina.

Después de beber esta sopa medicinal, había un periodo tan largo como lo que tarda un incienso en quemarse en el que sus ojos podían ver tan claro como el cristal y su oído era extremadamente agudo. Cuando este lapso terminaba, el dolor de cabeza comenzaría a abatirlo y, entonces, incluso abrir sus ojos se sentiría como si todo a su alrededor diera vueltas. Todos los sonidos alrededor de él harían eco tanto cerca como lejos.

Este síntoma se iría aliviando lentamente después de cerca de media hora. Más tarde, sus ojos y oídos podrían funcionar temporalmente como los de las personas normales.

¿Cuánto tiempo podía permanecer normal? Eso sería difícil de decir.

Cuando Gu Yun tomó esta medicina por primera vez, el malestar fue lo suficientemente doloroso para darse de cabeza contra la columna de la cama. Después de eso, fue capaz de ver y oír con claridad durante más de tres meses, casi le hizo olvidar que todavía tenía dos partes de su cuerpo disfuncionales.

Mientras fue usándola con más y más frecuencia; por un lado, había adquirido la habilidad de caer dormido sin importar qué tan fuerte fuera su dolor de cabeza; pero al mismo tiempo, la efectividad parecía ir disminuyendo poco a poco.

Actualmente, una sola dosis solo podría ser efectiva por cerca de tres o cinco días.

“Podría volverse completamente inútil en unos años…” Pensó Shen Yi.

Los dos, uno sentado, otro recostado, no dijeron ni una sola palabra. Solo fue hasta que la noche estaba oscura y que el sonido de la patrulla nocturna podía ser oído a la distancia que Shen Yi finalmente bajó su pincel. Se volvió para tomar una manta y cubrió a Gu Yun.

Gu Yun continuaba manteniendo la misma postura para dormir que un tiempo atrás, cuando se dejó caer, completamente inmóvil. Solo sus cejas estaban arrugadas, ligeramente juntas, sus labios y sus mejillas estaban de una palidez blanca como si no hubiera trazo de sangre. Aun así, sus dos marcas de belleza continuaban brillando.

Shen Yi lo observó, después salió caminando cuidadosamente.

Al día siguiente, cuando el Mariscal Gu despertó, se había vuelto a convertir en el Marqués del Orden desbordante de energía una vez más.

El día todavía no estaba brillante, pero Shen Yi ya se había despertado agitado gracias a Gu Yun. Contestó a la puerta con ojos adormilados, solo para ver a un entusiasta Gu Yun: –Por fin ha llegado lo que encargué. Solo mira, cuando le lleve esto para disculparme, ¡garantizo que esto puede apaciguar por completo la rabia de ese pequeño mocoso!

Shen Yi parpadeó con fuerza, de pronto, tuvo una premonición ominosa alzándose en su corazón.

El Marqués ordenó a cuatro soldados del Campamento de Hierro Negro mover una enorme caja, tan grande en tamaño como la columna de una casa, para luego marchar vigorosamente hacia donde se encontraba Chang Geng. Cuando pasaron al lado de los arbustos de menta que había estropeado la noche anterior, Gu Yun cortó otra hoja y la puso en su boca, sin importarle que su afilado borde se clavara en sus labios silbó una melodía que él mismo inventó, como para declarar desde la distancia que había descendido para hacer una visita.

Como resultado, uno de sus pies apenas había entrado a través de la puerta del patio de Chang Geng cuando fue inmediatamente recibido con una larga espada asesina volando hacia él. El sirviente que estaba cerca cargando una bandeja de té gritó de susto, la bandeja y todo lo que tenía encima se rompieron en pedazos al caer al suelo.

La muñeca de Gu Yun disparó una cuchilla del tamaño de una palma en un instante. Suprimiendo la espada que Chang Geng sostenía, todo su cuerpo se deslizó como un pez. Los dos ejes afilados entraron en contacto, creando un sonido. No obstante, después de que Gu Yun flexionó sus dedos, la muñeca de Chang Geng repentinamente se entumeció y casi tuvo que soltar la espada larga, forzándolo a retroceder.

Gu Yun retractó la cuchilla de vuelta a su muñequera y con ambas manos detrás de su espalda sonrió y dijo: –¿Qué ha irritado a Su Alteza tan temprano en la mañana? No importa, usted puede descargar todo su enojo contra su súbdito.

Chang Geng: –…

Este hombre de apellido Gu podría pensar que venía a disculparse, pero desafortunadamente, sin importa cómo se viera, parecía que llegó especialmente a buscar pelea.

Notas:

Acerca de la medición del tiempo en la Antigua China:

El calendario chino gira alrededor de un ciclo de sesenta años. Este ciclo está formado por la interacción de los Diez Troncos Celestes y las Doce Ramas Terrestres que son unidades de tiempo y lugar. Esto se originó a partir de la observación de los fenómenos astrológicos en la antigua China y su uso varió con el paso del tiempo. Así como las doce horas del día, están relacionados con el zodiaco chino.

Los Diez Troncos Celestes son: Jia (甲), Yi (乙), Bing (丙), Ding (丁), Wu (戊), Ji (己), Geng (庚), Xin (辛), Ren (壬) and Gui (癸).

Mientras que las Doce Ramas Terrestres son:

-Zi (子) Rata, 23:00pm a 01:00am (Zi Shi)

-Chou (丑) Buey, 01:00am a 03:00am (Chou Shi)

-Yin (寅) Tigre, 03:00am a 05:00am (Yin Shi)

-Mao (卯) Conejo, 05:0am a 07:00am (Mao Shi)

-Chen (辰) Dragón, 07:00am a 09:00am (Chen Shi)

-Si (巳) Serpiente, 09:00am a 11:00am (Si Shi)

-Wu (午) Caballo, 11:00am a 13:00pm (Wu Shi)

-Wei (未) Cabra, 13:00pm a 15:00pm (Wei Shi)

-Shen (申) Mono, 15:00pm a 17:00pm (Shen Shi)

-You (酉) Gallo, 17:00pm a 19:00pm (You Shi)

-Xu (戌) Perro, 19:00pm a 21:00pm (Xu Shi)

-Hai (亥) Cerdo, 21:00pm a 23:00pm (Hai Shi)

Los 24 términos solares (二十四节气 jiéqì) por otro lado se refieren a los términos climáticos que representan los cambios de estación según el calendario lunar chino, y según la situación de la Tierra en la órbita alrededor del sol. Los chinos de la Antigüedad dividieron el movimiento circular anual del Sol en 24 segmentos, asignando a cada uno de estos “períodos solares” un nombre específico:

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